Ya habíamos comentado en un artículo anterior (que puedes LEER AQUÍ) que las botas altas son un must have de este otoño/invierno 2017. Las opciones a la hora de combinarlas son infinitas tanto por diseño, color, tacón, corte o detalles. Existen multitud de opciones, cada una de ellas ideal para una ocasión determinada e incluso podemos elegirlas en función de nuestras necesidades.
Las botas altas siguen siendo una de las prendas it que comenzaron a entrar en nuestros zapateros la pasada temporada, aunque no ha sido hasta este otoño cuando empezaron a tener mayor relevancia convirtiéndose en las botas protagonistas de revistas de moda, street style, instagrammers y celebrities.
¿Por qué nos gustan tanto las botas altas en otoño?
Uno de los reencuentros más felices del otoño lo protagonizan las botas altas. Un tipo de zapato que, tenga el alto que tenga, suele puntuar con mucha nota entre el calzado favorito de cualquiera: son versátiles, calentitas y cómodas, valen para llevar un vestido o una falda en invierno, o darle un twist a unos vaqueros.
Las botas pueden transformar un look de abajo a arriba con sólo elegir las correctas. En los meses de calor se quedan relegadas a un segundo plano -dependiendo del modelo, hay algunas que ya tenemos que dejar aparcadas en primavera porque son muy abrigadas-, y, de ahí, que el reencuentro otoñal con este calzado sea uno de los mejores de la temporada.
Es obvio que el estilo de las botas cambian dependiendo de si son planas, con plataforma o con tacón, de si llevan o no ornamentos como flecos o tachuelas, o de si el estilo de la caña es más bien ecuestre o por el contrario más rockera, hay algo que determina con qué y cómo llevarlas independientemente de los detalles de cada una, y eso es el alto, con tres grandes favoritos por temporada: las botas bajo la rodilla, las botas por encima de la rodilla y las botas altas, altísimas que llegan hasta el medio muslo.






